El cocido maragato es una de las joyas de la corona de León, en Castrillo de Polvazares os podéis pegar un buen homenaje: cocido Maragato de Entrepiedras.
El último viaje que hicimos por tierras gallegas hizo que «ya de paso» nos surgiera la necesidad de hacer una parada a probar esta modalidad de cocido. Un amigo nos recomendó que paráramos en Castrillo de Polvazares porque era un pueblo que merecía la pena visitar y porque se comentaba que el cocido maragato lo bordan. Nos decantamos por la belleza del pueblo, pero ya que estábamos…
Parada casi obligada (mejor a la vuelta de las vacaciones) en este pueblo que está pegadito a Astorga y que pilla de camino si vas o vienes de Orense o Lugo.
Lo característico que tiene el cocido maragato es que se come al revés del típico madrileño, con sus 3 vuelcos, así que prepárate que vienen curvas.
En Entrepiedras lo bordan (tampoco hemos probado otro), además para la gente de buen comer será un sitio donde disfrute sin remilgos. Aquí podéis ojear la receta que tienen colgada en su web.
Nosotros llamamos para hacer reserva el día antes. Aun teniendo carta, sólo vimos servir cocido, por algo será.
Vamos al tema.
Para empezar, traen la «pequeña» fuente de carnes: morcillo, lacón, gallina, chorizo, relleno. Por si acaso también va panceta, oreja, manitas, morro, careta y costilla de cerdo. Eso si, lo acompañan con un tomatito bien aliñado que desengrasa 😉 Las carnes buenísimas, destacables la costilla, el chorizo y el lacón. El relleno, a pesar de que no es nuestro mejor amigo también estaba bueno.
No os volváis locos comiendo que luego faltan dos platos. Mientras seguís con la carne, podéis pedir que os vayan trayendo los garbanzos con el repollo para hacerlo más ameno.
También podéis repetir de lo que queráis, aunque os adelantamos que igual con lo que sacaron habían comido 6 personas sin inmutarse, no exageramos.
Los garbanzos muy muy tiernos y el repollo tiene un buen punto. Igual con los garbanzos, a costa de que estén extremadamente tiernos se despellejan de más. Nos los comimos disfrutando de todos modos.
Si después de todo esto vas con ganas, te llega el perolo de sopa. Con todo lo que lleva está buena, pero igual le falta un punto más de sabor, aunque si es verdad que lo llevas bien marcado con todo lo anterior. Hay que aligerar.
Para rematar y aunque ya no tuviéramos hueco alguno llegan las natillas caseras con galleta. Buenísimas, a pesar de estar ya a punto del desmayo acabamos con ellas. Eso las deja en buen lugar.
Al final con un chupito parece que se hace una buena digestión del festival cárnico, así es la vida.
El homenaje junto con 1 botella de agua y dos copas de vino tinto (había que conducir) sale a unos 18€ por cabeza. Y de regalo te dan amablemente una bolsita de sus garbanzos por comensal para que te lances a hacerlos en casa. ¿qué más se puede pedir?
Recomendado no, recomendadísimo. Y más si aprovecháis a parar a la vuelta de Galicia y os lleváis lo que no seáis capaces de comer en tupper. ¡Viva el tupper!
Las fotos las hemos cogido de su web. No os perdáis la visita al pueblo y a Astorga.
Calle Real, 29, 24718, Castillo de los Polvazares, León