Mucho habíamos oído hablar sobre unas de las mejores pizzas de Madrid y aunque tardamos en decidirnos, con tantos sitios pendientes a los que ir, para allá que fuimos.
Picsa es una pizzería artesanal argentina en la zona de Chamberí. Tienen un horno de leña de cagarse la perra al que le meten madera de encina.
El local no es demasiado grande, tienen unas pocas mesas pero también puedes comer en la barra, como en nuestro caso.
Fuimos dos y pedimos un par de vinos para ir calentando mientras preparaban las famosas pizzas con masa gordita. Trajeron unas aceitunas como preámbulo y además pedimos la tapa de calabacines asados en leña con salsa de yogur y eneldo. Era un entrante sencillo, distinto, fresco pero tampoco nos entusiasmo en exceso. Aunque he de decir que estaba bien.
Luego pedimos una pizza a compartir de dos sabores (foto portada). Una mitad de la Calabresa (tomate, queso Picsa, chorizo picante, provolone, piparras y aceitunas) y la otra de Queso azul y setas (tomate, queso Picsa, gorgonzola y trompetas de la muerte).
La primera mitad es muy del estilo de la invitada y acompañante habitual, nos chiflan las piparras y el chorizo picante y hay que decir que la pizza estaba tremenda. No escatiman en queso ni ingredientes, además una vez sale la pizza de ese pedazo de horno la aliñan con diversos elementos (hierbas, aceites…) que hacen que suba bastante la intensidad de sabores.
La segunda mitad es muy mía, con esas trompetas de la muerte que me llevan de camino a la perdición y que con el queso azul iban genial. Estaba muy buena pero si es verdad que no tanto como la Calabresa.
Con la pizza para dos personas para cenar ya vas bien, pero bueno ya que estábamos… fuimos a por un postre casero que se terminaba también en el horno de leña. Pedimos una tarta de manzana con helado de vainilla que estaba buenísima y más viendo como entra y sale del horno directa a tu plato.
Sitio al que tienes que ir si o sí. Aún estando las pizzas buenísimas creo que están un pelín subidas de precio, una media de 25€, aunque hay que pagar la calidad de los ingredientes, la masa y el horno de leña por supuesto.
Para 2 personas, 3 copas de vino, 1 entrante, 1 pizza a compartir y 1 postre sales a 20-22€ por cabeza.
Calle de Ponzano, 76, 28003 Madrid