Nos encanta la cocina italiana, de racha en racha nos da por cenar pizzas de forma habitual: pizza crujiente con mozarella fresca
La idea de como hacer la pizza (aunque nosotros con base comprada) viene, como no, de un programa de Robin Food con Iban Yarza en el que las hornean como os explicamos a continuación.
Nosotros compramos en el supermercado de la música pegadiza las bases de pizza congelada artesana extrafina en paquetes de 3. Nos gusta mucho como quedan, para lo que cuestan y lo que conocemos.
Para 2 pizzas
2 bases de pizza
Tomate frito
Una bola de mozarella fresca
Un champiñon grande laminado fino
Un poco de sobrasada
Unas rodajas de peperoni
Un puñado de aceitunas verdes partidas a la mitad
Rúcula aliñada
Pimienta y aceite picante (opcional)
Elaboración
1. Lo primero es sacar las masas del congelador y poner a escurrir desmenuzada la mozarella. Para que no suelte agua en la pizza al hornearse presionamos bien en un colador y dejamos que se escurra completamente. Nosotros lo solemos dejar al menos una hora.
2. Ponemos el horno a lo máximo que dé. La idea es dejar las pizzas con papel de horno sobre la parte baja del horno para que quede crujiente.
3. Montamos la primera pizza con tomate, la media mozarella desmenuzada, el champiñón laminado, y unas puntas de sobrasada que repartimos aleatoriamente.
4. La segundo pizza va con tomate, la mozarella, el pepperoni y las aceitunas.
5. Cuando esté el horno a la temperatura metemos la pizza con cuidado y dejamos cocer durante unos 3-4 minutos. La parte de abajo quedará muy crujiente aunque no se gratinará la parte de arriba. Si en este punto queréis gratinarlo, sacadla cuando lleve un par de minutos y ponerla en la parte de arriba durante otros 2-3 minutos hasta que os guste.
6. Hacemos lo mismo con la segunda pizza.
Rematamos ambas pizzas con la rúcula aliñada, la pimienta y el chorrito de aceite picante si se quiere.
Son cenas realmente fáciles que se finiquitan en un momento y sirve también para cuando tenéis invitados por sorpresa.